108.000 euros de indemnización para una motorista de Granada que se cayó al evitar chocar contra un coche
La accidentada sufrió una fractura en la rodilla en el verano de 2015 al frenar para no impactar con el turismo, que salía de un callejón marcha atrás.
Ocurrió el 1 de julio de 2015 a la altura del callejón del Jalifa. Conchi C. L. conducía una motocicleta Honda por la Carretera de la Sierra, en la capital, cuando, de forma repentina, un turismo BMW se cruzó en su camino. El coche iba marcha atrás y al frenar ella para no chocarse se fue al suelo. La mujer, que resultó lesionada en la rodilla y en la tibia (tuvo una fractura de la meseta tibial) , va a ser indemnizada con 108.299 euros, después de que la compañía aseguradora del turismo y el abogado de la accidentada, Joaquín Perales, del despacho Perales Abogados, hayan alcanzado un acuerdo sobre los intereses moratorios que la accidentada habrá de cobrar: los 58.451 euros de la inmdenización fijada y 49.848 más de los referidos intereses.
IDEAL ha tenido acceso al último documento que se ha presentado en el órgano donde aterrizó el caso: el Juzgado de Primera Instancia número 13 de Granada. En él, las partes muestran su conformidad con esa cuantía y renuncian a recurrir la sentencia.
La demanda
En su demanda, el letrado de la accidentada, sostenía que el siniestro se había producido al realizar el conductor del BMW una «maniobra antirreglamentaria de marcha atrás desde un callejón adyacente» a la Carretera de la Sierra. Explicaba que el conductor carecía de visibilidad para realizar aquella maniobra de incorporación marcha atrás que se saldó con la caída que llevó a la motorista al hospital. Existía, según la demanda, «un furgón aparcado en el margen derecho de la calzada», por lo que el BMW, al dar marcha atrás, no vio bien el carril que iba a invadir y por donde venía circulando la motocicleta Honda. Fue, según sostenía el letrado de Conchi C. L., una «invasión repentina» y a la mujer, que tiene ahora 44 años, «apenas le dio tiempo de poder pitar» y de realizar una «maniobra brusca de frenado» para evitar el impacto. Sin mas remedio, cayó en la calzada.
Se da la circunstancia de que en su atestado, la Policía Local de Granada había concluido que «la causa eficiente» del siniestro «pudo ser la errónea maniobra evasiva que realizó la conductora de la motocicleta». Determinó que Conchi C. L. dispuso, ante el obstáculo que encontró ante sí, «de tiempo y espacio suficiente para realizar una acción más acorde y comedida ante dicha situación». Sin embargo, la mujer, a juicio de la Policía, decidió «realizar una maniobra brusca de frenado a más de 20 metros de distancia del posible punto de riesgo, perdiendo la verticalidad y cayendo sobre la calzada».
El letrado de la motorista discrepaba de las conclusiones del atestado, pues el conductor del BMW debió, en su opinión, realizar aquella maniobra lentamente y con todas las precauciones. Por contra, alegaba que la motocicleta Honda «circulaba, en los preludios del accidente, a una velocidad aproximada de 48 km/hora», así como que la conductora «lo hacía atenta y de forma diligente a las circunstancias de la conducción».
A mediados de abril, la aseguradora había consignado cerca de 60.000 euros para la lesionada y, ahora, habrá de pagarle el resto.
La víctima del siniestro: «Fue un golpe muy grande y he estado tres años y medio de baja»
A Conchi C. L. el accidente que sufrió en 2015 en el callejón del Jalifa le generó un suplicio vital. «Fue un golpe muy grande y he estado tres años y medio dada de baja», recuerda la mujer a IDEAL, tras especificar que no circulaba sola en la moto, sino que iba subida también su madre de 80 años. A la anciana no le pasó nada, pero a Conchi fue como si le hubiesen «machacado la pierna con un martillo» por debajo de la rodilla: se le astilló. «He tenido dos intervenciones», indica la mujer, que ya no puede correr, jugar al tenis o agacharse para limpiar. «En cuestión de segundos ves cómo tu vida peligra», rememora Conchi que estuvo «seis meses en silla de ruedas». Su pesadilla culmina ahora, aunque sigue en rehabilitación, y está muy agradecida a su abogado.